El sábado pasado tuvimos nuestra reunión del Pre-Sisterhood en Houston y hablamos un poco acerca de la historia de Jacob y Esau, y de como cambió el corazón de Jacob de un tramposo a un hombre de fe. Su nombre fue cambiado a Israel – ¡él que lucha con Dios!
Le pregunté a nuestras niñas, “¿Está bien que luchemos con Dios?” Muchas me miraron fijamente e hicieron “no” con sus cabezas. ¡Que sorpresa aprender que la respuesta es SI! Necesitamos ser dulces, amables, gentiles, amorosas y sensibles a las necesidades de los otros, pero al mismo tiempo, debemos ser valientes y firmes en nuestras oraciones a Dios. ¡Él ama la fe atrevida!
¿Podemos aceptar la tristeza y depresión? ¡No!
¿Debemos de tener miedo de las malas noticias? ¡No!
De Baby Sisters a grandes hombres de fe, Dios quiere que todas seamos firmes en creer que estamos seguras en Sus Manos, y que todo mal está bajo nuestros pies. Dios estaba tan feliz y complacido con Jacob cuando luchó con Él. Seamos siempre niñas y mujeres de fe que agradan a Dios como lo hizo Jacob.
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